domingo, 17 de octubre de 2010

La generosidad de los más pobres

¿Será cierto el dicho de que los que más tienen, menos dan? Mi experiencia en Incahuasi corrobora que los que menos tienen, más ofrecen.
En mi estancia en la sierra de Lambayeque fue invitada muchas veces a comer por la gente de allá, campesinos que viven de lo poco que cultivan.
"Siento poder ofrecerle tan poco, señorita, es la humilde comida que tenemos" me decían al salir por la puerta después de saborear la rica comida que me habían brindado sin apenas conocerme, en su casa y compartiendo un espacio junto a sus seres y amigos queridos.
La comida en las celebraciones era abundante y casi imposible poder terminarla. Las mantitas que estiraban en el suelo o en la mesa estaban repletas de todo tipo de clases de papas, maíz sancochado, canchitas, queso en pedazos, etc. Y por si era poco había algunas veces que te daban uno y dos tazones de caldo con papas y carne.
Siempre tuve que echar en una bolsa de plástico lo que no podía terminar. Pues allá es de mala educación no comerse lo que te ofrecen.
A pesar de que no hubiera ninguna celebración, la gente te ofrecía su comida y lo que ellos tenían en el momento. Siempre atentos a lo que podías necesitar. Esa amabilidad nunca jamás la había visto y menos sentido en propia persona de tal manera como acá.
Otro de los ejemplos que tengo siempre en mente es la visita a Janque, un caserío incomunicado en la sierra de Incahuasi, al que sólo se accede después de haber caminado cerca de una hora y media por las montañas. El llegar allá sin conocer a nadie y después de dos días, salir conociendo a personas con las que aun mantengo contacto fue una experiencia muy linda para mí. No sólo me dieron atención constante el tiempo que compartí con ellos, sino que me ofrecieron un sitio donde pasar la noche, un colchón y comida y cena... además de una agradable charla y compañía, haciéndome partícipe de su grupo.
Y lo más significativo es que estas poblaciones mantienen un índice de pobreza de aproximadamente un 95%, lo cual creo que hace mucho más valorable su amabilidad y generosidad.
Me pregunto si yo, teniendo más que ellos, sería igual de generosa con una persona que no conozco.